En una mesa de póquer, no suelen hacer falta varios minutos para averiguar quién manda y quién es el mandón. El trasfondo aquí parece bastante claro. Compórtate como un tiburón blanco contra tus oponentes.
En una mesa de póquer, no suelen hacer falta varios minutos para averiguar quién manda y quién es el mandón. El trasfondo aquí parece bastante claro. Compórtate como un tiburón blanco contra tus oponentes.